Durante mucho tiempo, la escritura como prueba sólo se ha aceptado en papel. La situación es diferente hoy en día con la llegada de la tecnología digital. De hecho, hubo que esperar a la intervención del legislador a través de la ley 045-2009/AN de 10 de noviembre de 2009 sobre la regulación de los servicios y transacciones electrónicas en Burkina Faso para reconocer el valor probatorio de la escritura, independientemente de su soporte, es decir, digital o físico. La intervención del legislador se explica por la idea de neutralidad tecnológica. Sin embargo, se plantea la cuestión del propio documento digital como prueba. En otras palabras, se trata de saber en qué casos la escritura digital puede utilizarse como prueba en un litigio. El legislador se ha pronunciado sobre esta cuestión. Sin embargo, también existen normas jurisprudenciales que deben respetarse cuando se hace referencia a la escritura como prueba en el mundo digital. Además, cuando se trata de pruebas digitales, el papel del experto se vuelve esencial.