A lo largo de nuestro viaje como creyentes habrá ocasiones en las que seremos confrontados con decisiones que alteran toda nuestra vida. Cuando estemos frente a esa encrucijada, ¿qué decisión tomaremos? ¿Se hará conforme a los caminos del hombre o según los caminos de Dios? Esa es la esencia del mensaje de Las dos sendas. El Señor le ruega a Su Iglesia que escuche lo que el Espíritu está hablando en esta hora; ¿estamos escuchando? ¿Estamos discerniendo? Y, ¿estamos respondiendo? Que mientras recorremos los senderos de Dios en esta vida, el Señor nos ayude a estar entre quienes no solo son llamados, sino también escogidos y hallados fieles.